Una nota del Patriarcado latíno de Jerusalén, analizas y denuncia los resultados difundidos por el informe del Ministerio de la educación israelí, que clasifica las escuelas en 4 rangos, la mayoría de los institutos católicos, colocados en dos primeros niveles, mientras que solamente uno en tercera posición.
«Si lo analizamos detenidamente, el informe indica que las escuelas privadas son relativamente mucho mejores que las escuelas públicas en general, en proporción, mientras que los cristianos constituyen solamente un 1 % de la población israelí, ¡las escuelas cristianas representan el 3 % de la lista! ¡Y todavía lo podemos hacer mejor!», declaró Wadie Abunassar, miembro de la comunidad árabo-cristiana Internacional, director del Centro consultivo y experto en los medios de comunicación israelíes, palestinos e internacionales sobre la situación en Medio Oriente y en Tierra Santa.
Las escuelas cristianas en Israel administradas por católicos, ortodoxos y protestantes de las denominaciones diferentes, son 47 en total y son frecuentadas por aproximadamente 33 mil estudiantes cristianos, musulmanes, judíos y drusos.
Está sin resolver el problema de la reducción de las financiaciones públicas en favor de las escuelas cristianas, que ha disminuido en un 45 % en seis años, a lo que se añade la prohibición de recibir ningún fondo suplementario parte de las familias de los alumnos. Por último el gobierno exhortó a las escuelas cristianas a unirse al sistema educativo de las escuelas israelíes públicas: una medida percibida como una amenaza a la propia identidad.
Después de la huelga de 27 días que tuvo lugar al principio del último año escolar, las escuelas cristianas consiguieron del Ministerio un acuerdo para una subvención de 5 millones de shekel, a partir del 31 de marzo del 2016, dinero que está todavía sin desembolsar, colocando por lo tanto a numerosos institutos cristianos al borde de la quiebra.